17 de Febrero de 2.009 El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, dijo ayer que, ante el recrudecimiento de la situación económica, se puede llegar a plantear la intervención de alguna entidad financiera. Aunque no precisó si se refería a un banco o una caja, advirtió que “hasta ahora no ha sido necesario, pero con la intensidad de la crisis no puede descartarse nada”. El máximo responsable de la supervisión del sistema financiero español señaló que la banca española es muy sólida, pero se enfrenta a problemas importantes, como el fuerte repunte de la morosidad y la elevada exposición al sector inmobiliario. Ante este escenario, “bancos y cajas necesitan reestructurarse” con fusiones o redimensinándose, dijo. En este sentido, señaló que “si una fusión mejora la solvencia y la situación de la entidad, adelante, porque desde el Banco de España lo que nos importa es tener una sistema financiero sólido”. Sin embargo, explicó que el organismo ni va a fomentar ni va a impulsar estas operaciones. Acerca de las críticas vertidas sobre la banca por endurecer los criterios de concesión de créditos, Fernández Ordóñez dijo que era “evidente” que bancos y cajas otorgan menos préstamos ante el descenso de la demanda, pero también que han adoptado “una actitud más cuidadosa a la hora de concederlos tras el repunte de la morosidad y una financiación más complicada”. Pronosticó que este año se asistirá a “un crecimiento de crédito mucho menor”, e incluso vaticinó “varios años de desapalancamiento”. FUENTE: CINCO DÍAS
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